Las personas que hayan nacido el día 2 de cualquier mes, tienen como parte primordial en su vida la búsqueda de pareja y si no es con la pareja, buscarán sustitutos en los hijos, madre o padre y es que el dos rige la compañía, la afectividad, la empatía y en muchos casos la dependencia.
Los recuerdos de la niñez los seguirán durante toda su vida, tal vez no recuerden fechas, pero si las emociones que percibieron.
Son muy buenos organizadores. Representan la paternidad, la maternidad, la sensibilidad y los sueños.
En el Tarot al número 2 lo representa LA SACERDOTISA, persona prudente sabia y estudiosa, que no dice todo lo que sabe, está llena de intuición, por lo que los nacidos en este número tienden a ser muy intuitivos y presentir eventos o sentimientos.
Las personas nacidas en un número 2 son soñadoras, tienden a temer lo desconocido o que les es poco familiar, son muy imaginativos y con gran inventiva, pero no siempre ponen iguales energías en llevar a cabo sus planes, su salud puede ser su punto débil o depender por completo de sus emociones.
La persona 2 teme cualquier tipo de pérdida, de empleo, separación, de seres queridos, etc., necesita un hogar como base y aunque le encanta viajar debe tener una casa definitiva, de ningún modo deben vivir a la deriva, demuestran una devoción por sus padres y por su parte son excelentes padres pero deben tener cuidado de no asfixiar a sus hijos con lo posesivo de su amor.
Es una vibración protectora y se ocupan mucho del bienestar de parientes y amigos, suelen ser muy cautas y previsoras por lo que no les gustan los juegos de azar, aman el dinero pero lo acumulan de modo seguro y estable, esta vibración está cargada de secretos nunca deja que los demás adivinen sus pasos y ellos son expertos en sacar secretos ajenos, se mueven de derecha a izquierda y retroceden antes de avanzar de modo asombrosamente agresivo hacia su objetivo, el dinero se les pega muchas veces y son muy caritativos y les asusta sumamente depender económicamente de los demás.
El número 2 hable y dice:
Supera tus miedos y tendencia posesiva, utiliza tu imaginación y tu intuición que yo te llevare donde nada te falte.
Los nacidos en 11, 20, o 29, tendrán por añadidura lo siguiente:
Nacidos en 11
Tendrán además de las enseñanzas del número dos, la gran oportunidad de trascender, ya que el 11 es un número maestro y viene con la gran misión de servir de ejemplo a sus semejantes en base al servicio y la enseñanza en cualquier campo, a cambio se le facilitará rodearse de amigos o seguidores, de oportunidades para aprender y no en pocos casos a tener acceso después de eso, a medios de comunicación que les ayude a difundir su mensaje, pasará sin embargo por pruebas dificiles aparentes separaciones por lo que no debe perder nunca su individualidad, el secreto estará siempre en aprender del camino andado y obtener el valor necesario para afrontar solo las cosas. Si se quiere seguir al número maestro deberá de nunca perder la humildad, de otro modo la vibración de este número maestro se diluirá en la de el 2 simplemente.
Nacidos en 20
Lo representa la figura de EL JUICIO, por lo que en algún punto de su vida, tendrá un despertar con nuevos propósitos, planes y ambiciones, es el llamado a la acción de una nueva causa, lo principal a desarrollar es la paciencia ya que, al no ser un número material difícilmente le permitirá atesorar, sin embargo sus necesidades siempre se verán cubiertas, son favorecidos con sueños premonitorios y la oportunidad de cambiar los malos por otros muchos mejores, todo es en base a lo que se crea.
Nacidos en 29
Es uno de los números más pesados de llevar, ya que pareciera estar marcado por constantes renuncias, traiciones y engaños, así como sufrimientos provocados por el sexo opuesto, el desarrollo de la fe absoluta en la bondad y en el poder del Yo, junto con un cultivo constante de optimismo, actuarán como milagrosa medicina para este número, se le conoce como el número de Job, aludiendo a una vida de tribulaciones que terminaron felizmente cuando se asumen las responsabilidad sin dejar nunca más el culpar o buscar venganza por los dolores propios. De ser así, se recupera todo lo perdido y multiplicado además por añadidura.
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